sábado, 15 de octubre de 2011

¿Qué es estar solo?


Me doy cuenta de lo que pretende mi subconsciente. Es triste, pero hay veces en que no me esfuerzo en frenar mis impulsos.
 Las palabras brotan del suelo, es como si tuvieran alas, se acercan a mí, mi cabeza solo las atrapa y me dice a mí misma: “solo escribe”.
 El título iba a ser “¿Qué es estar loco?”. Pero mi retorcida y justificada mente me repite una y otra vez que el tema no vale la pena como este… que le deje el espacio… que pase al otro polo, y yo…
 No lo evito más, estoy tan… cansada…
 Estar solo. Sentirte el único a miles de millas de la única ciudad habitada en la Tierra, o lo mismo, escribiendo una especie de carta en medio de la clase de matemáticas, rodeada de chicos y chicas trabajando en grupo, en una tarea que vos ya terminaste, la cuál guardas pacientemente para entregar al final de la hora. Nada mejor que esperar, pensando en lo solo que te sentís, el desconsuelo de no valer nada, no sentir más que angustia.
 Y mirar al frente. Y verla a ella, con su grupo, obviamente, feliz. Sonreís.
 Y pensás lo lindo que sería gritar en ese momento, solo para que ella te mire, preguntándose “¿Qué le pasa a esta loca?” y sin embargo te es suficiente, pero lo reconsideras, y bajás la mirada y decís “¿Qué demonios me pasa?”
 Y salís, y lo ves a él, vas al grupo, único lugar dónde no estás sola, pero sentís angustia, porque sí, ahí está él. Volvés a sentir el impulso irrefrenable de gritar, para que te mire. Y te acordás que nada de esas cosas va a mejorar nada.
 Y por último, recordás la noche anterior, apretando con un chico del cuál ni del nombre te acordás. Te mordés los labios. Sentís otro impulso, el de llorar. No te frenás.
— ¿Qué te pasa?
—Nada, una basurita en el ojo.
Creo que ahí te empiezas a dar cuenta… lo que es ir quedándote solo.
Te necesito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario